BALANCE DE LA “LEY SECA” URUGUAYA
- Alberto Colombo
- 27 ago 2018
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Exposición de beneficios y desafíos del marco legal respecto al cannabis (ley 19.172), aprobado por el Parlamento en 2013.
La ley señalada presenta un cambio en el control del uso del cannabis, abandonando esa doble moral donde se permitía su consumo pero se penalizaba la comercialización y cultivo. Ahora se pasa a un carácter regulador de la producción, distribución, del consumo recreacional y científico del cannabis.
Con esta ley se promueve un enfoque desde los Derechos Humanos, al considerar la salud pública, el derecho a la información, desalentar la estigmatización. En tal sentido, es factible desear que al incentivar las denominadas estrategias de reducción de daños, tales como las políticas de educación e información que comprende la nueva norma legal, permitan aumentar la percepción de riesgo del consumo de la sustancia en la población uruguaya a mediano y largo plazo, retrasando la edad promedio inicial del consumo y reduciendo la frecuencia e intensidad del consumo general.
En tal sentido, desde el gobierno se afirma que se está procurando junto con la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) incorporar una política educativa sostenida sobre el consumo de drogas y sus riesgos. También se realizó una campaña de consumo responsable, donde se abordó los efectos potenciales que tiene el cannabis para la salud.
Sobre el impacto de la implementación de la denominada ley de marihuana es difícil tener resultados objetivos, aunque si bien desde esferas oficiales se afirma que el 50% de las personas que usan cannabis en Uruguay lo hacen por la vía legal (estiman que son 50 mil quienes lo adquieren de esta manera) y calcula que cerca de 8 millones de dólares ya no nutren las cuentas del narcotráfico en nuestro país.
Por otro lado, existen inconvenientes en brindar datos objetivos, así como en la producción y venta de marihuana: acceden solo unos 25 mil uruguayos, pocas farmacias venden el producto y los stocks son escasos. La brecha es muy importante para cubrir entre la necesidad del consumidor registrado y lo que se coloca en el mercado formal, se estima que solo se llega al 20 % de lo necesario para responder a la demanda regulada por la Ley 19.172. Por todo esto, los analistas en la materia hablan de “implementación parcial” de la señalada norma legislativa.
Según investigadores académicos, la regulación de esta droga no afecta el crimen de forma directa, por lo que no generará modificaciones en el tema seguridad, tal como se ha percibido desde su vigencia. Entre otros factores, porque los mercados no regulados de cannabis “no son violentos”.
Pero la ley 19.172 también posiciona a Uruguay en el debate internacional sobre políticas de drogas en un accionar coherente con su discurso, ya que ha sostenido en importantes foros internacionales la necesidad del derecho democrático a abrir un debate que permita trascender el actual modelo de la guerra contra las drogas, visión esta conservadora, represiva e ineficaz, como lo demuestra la realidad.
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