REDES QUE AMORTIGUAN...O IMPULSAN

Como forma de prevenir el consumo de drogas para la población de personas en situación de calle en nuestro país, cabe tener en cuenta el mapa de los actores sociales para abordar el tema en Red. Recordemos que estos sujetos antes de este devenir conformaban familias, trabajaban, interactuaban como cualquiera hasta llegar a ese estado, por diferentes factores. No son seres extrapolados de otro planeta, sino emergentes de nuestra sociedad. Para intervenir de manera preventiva el consumo de sustancias psicoactivas para quienes asisten a los centros nocturnos del MIDES (Ministerio de Desarrollo Social), los denominados Refugios, donde lo primero es dable señalar las características de la “situación problema”. Cuando las causas se plantean desde lo individual, la atención se centra en el consumo problemático de drogas, que suele derivar en dificultades vinculares, en patologías psiquiátricas, haciendo responsable al individuo de la situación en la que se encuentra. Desde la perspectiva de lo social, la mirada está colocada en la desvinculación de redes primarias de sostén donde se observan carencias afectivas notorias, promotoras de procesos depresivos, de baja autoestima, y que en general desembocan en la adquisición de hábitos o conductas de consumos problemáticos de sustancias psicoactivas o patologías, que en forma de espiral aceleran y profundizan aún más la problemática. Esta situación, de extrema vulnerabilidad inhabilita el ejercicio pleno de sus derechos como ciudadanos. Los actores sociales más significativos e imprescindibles, para abordar en Red este tema a ser tenidos en cuenta en el proceso son: el Equipo que gestiona el refugio (con psicólogo y trabajador social, grupo de educadores, auxiliar de enfermería y de servicio), funcionarios del MIDES del Programa de Atención a Personas en Situación de Calle (PASC), así como la población usuaria del Centro, familiares y amigos de estos. Los actores informales a ser considerados en esta metodología: el personal administrativo de la organización, comunidad cercana (comerciantes, vecinos), Centro Comunal, comunidades religiosas, empleadores de los usuarios, conductores de autos particulares (la mayoría de los usuarios se desempeñan como cuidacoches, y en la realidad actual, las organizaciones que trabajan con inmigrantes (SEDHU, Idas y Vueltas). La red de servicios que se ha ido construyendo y consolidando, por la cual puede obtenerse respuestas a las necesidades, problemas y situaciones específicas de estas personas que lo requieran, está compuesta por: organizaciones comunitarias (Grupos de Narcóticos Anónimos –NA-, Alcohólicos Anónimos -AA-, Centro Cultural Urbano), las iglesias, los centros de salud (policlínicas, hospitales como Vilardebó, Filtro, Maciel y Clínicas, dispositivos Portal Ciudadela y Portal Amarillo, Programa de Proximidad Aleros), emergencia móvil, otros refugios, la policía, personal del transporte público y de centros recreativos y culturales de la zona, usuarios de espacios públicos (plazas, rambla, parques, terminales del transporte). Identificamos ciertas fortalezas y debilidades - al día de hoy - para el abordaje en Red de esta problemática. En cuanto a las fortalezas, se destacan: 1) Integrar un programa oficial ministerial (PASC), por lo que está inserto en un sistema institucional de protección social abriendo la perspectiva a una importante fuente de recursos. 2) Las organizaciones que realizan las intervenciones, cooperativas de trabajo y ONGs poseen en general, de larga trayectoria en la gestión de proyectos que atienden mayoritariamente a situaciones de vulnerabilidad (refugios, otros proyectos en diferentes áreas de impacto social), que le otorga una estructura comunitaria que ha generado redes, con instituciones y organizaciones de diversa índole. Debilidades para ese abordaje: 1) La escasa coordinación interinstitucional para el abordaje del consumo de sustancias psicoactivas, provocando la suma desordenada de recursos que recaen sobre el usuario sin un encadenamiento lógico y preciso de intervenciones, o imposibilitando su acceso. 2) Los refugios para hombres, en general, tienen un funcionamiento que es de lunes a viernes de 18 hs a 9 hs y los domingos 24 hs., por lo que acota el abordaje temporal y en recursos, de la situación problematizada y además existe un tiempo ocioso que para las personas en abuso de drogas no resulta positivo. Finalmente, esbozando brevemente un Plan para el Trabajo en Red que realice un abordaje esta "situación problema” que venimos describiendo, el mismo debería contemplar: Como Objetivo General, promover estrategias que habiliten a las personas en situación de calle, transformaciones tendientes a la restitución de sus derechos desde una perspectiva integral, derechos tales como acceso al mercado laboral, atención en salud, prestaciones sociales, propuestas culturales, actividades recreativas y vinculadas a la actividad física, otros. En cuanto a los Objetivos Específicos: - Brindar atención directa y personalizada procurando una desarrollar la atención integral de la población objetivo. Mejorar condiciones de vida (se logra mediante el trabajo en red: habitación, alimentación, servicios de higiénicos, acompañamiento psico-afectivo). Las condiciones de riesgo de abuso de drogas merman cuando las condiciones de vida mejoran, mantenerla en el día a día en tiempos prolongados, para que la persona pueda estabilizarse. - La promoción de la generación y/o recuperación de redes familiares y sociales, iniciando procesos de inclusión social y laboral (significa el incremento y la modificación de la red subjetiva, incluyendo actividades diversificadas de tipo educativo, modificando el campo ocupacional y cultural), en el sentido de la construcción de un nuevo proyecto de vida. Respecto a las actividades básicas para el logro de estos objetivos específicos, hay que desarrollar acciones que promuevan un egreso sustentable de la situación de calle, abriendo otras perspectivas personales, nuevos intereses. Para ello se habrá de: • Acompañar en el proceso de la gestión de distintas prestaciones sociales (BPS, Carné de Salud, afiliaciones a ASSE, Facultad de Odontología, Programa de Identidad del MIDES, Dirección de Identificación Civil, vínculos con hogares de residencia y otras alternativas). • Promover la generación y/o recuperación de redes familiares y sociales (reuniones con familiares, realizar tareas colectivas, cumplir normas de convivencia, asambleas de usuarios del Centro, talleres en temáticas diversas). • Promover la participación en actividades sociales facilitando el acceso a diversas propuestas culturales y recreativas con el propósito de desarrollar habilidades sociales (actualización educativa, asistencia a espectáculos del Solís, SODRE, cine, Carnaval, paseos; talleres de Literatura, Música, Cine Foro, Higiene, Huerta, Meditación, Deportes, Informática, que habrán de estimular la autoestima, la participación activa, el encuentro con el otro, fomentando la motivación, diálogo y reflexión). • Facilitar herramientas para el acceso al mercado laboral que permitan una mayor autonomía de las personas (capacitación y talleres de inserción laboral; elaboración de CV; contacto con empresas cercanas para bolsa de trabajo; acceso a páginas de búsqueda laboral). Este análisis pretende enriquecer nuestras miradas sobre las potencialidades del trabajo en Red para la intervención social en lo referente al abordaje multidisciplinario sobre la problemática del consumo de drogas.

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